Con el cierre ayer de la pista de la plaza del Ensanche, en Irun hemos puesto el punto final a una campaña navideña que marca un antes y un después. Nuestros comerciantes han sabido dinamizar la Navidad de una manera espectacular. Porque se trata de que la Navidad sea la “temporada alta” de nuestras tiendas, sí, pero se trata de mucho más. Se trata de ilusionar, de emocionar, de hacer ciudad, de convertirse en un punto de referencia desde Burdeos hasta Bilbao, como decía la prensa este fin de semana. Se trataba de ser un referente y se ha conseguido.

Solo puedo estar agradecido a quienes han puesto mucho, muchísimo, de su parte para que Irun haya estado estas navidades en boca de todos. Ha sido un triunfo del comercio y los comerciantes, ha sido un éxito de la ciudad, y ha sido la victoria de trabajar todos juntos y remar en la misma dirección, en la dirección positiva. Porque, en definitiva, buenas noticias hay y tenemos que ponerlas en valor, y contagiar de energía positiva a los que nos rodean.

Me consta que estas navidades los iruneses se han sentido orgullosos “de la que se ha liado en Irun” y que nuestros visitantes se han quedado sorprendidos de la ciudad dinámica, moderna y agradable que somos. Con eso me quedo, con que los de casa estén a gusto y no necesiten buscar fuera lo que tienen dentro y con que los vecinos de nuestro entorno vean en Irun una gran alternativa de ocio y compras. Hay que seguir trabajando para que Irun siga siendo este lugar estupendo. Gracias a todos lo que estas navidades habéis colaborado en ello.