20160921_170853 20160921_172944El Mes de septiembre nos deja otras citas sobre el puente Avenida. En este caso el homenaje que nuestros vecinos de Hendaia quisieron hacer a los Republicanos españoles. Una placa recuerda este momento para siempre en la orilla francesa. Os dejo mis palabras de aquella tarde y algunas imágenes del acto en el que se cantaron poemas de Lorca

 

Bonjour, Arratsaldeon, buenas tardes

Merci a nos amis d’Hendaye, pour nous invité à cet acte de memoire au pont de l’Avenue., c´est hommage a des milliards de espagñols et de republicans qui ont traversé l´avenida pour cherche la liberté..

Nous voulons aujourd’hui donc rendre cet hommage eta rappeler cet épisode de notre histoire commun

Arratsaldeon. Mila esker gu ekitaldi honetara gonbidatzeagatik. Duela egun batzuk zubi erdian aurkitu ginen Irungo sutea gogora ekartzeko, gaur berriz, hemen gaude, historiari begira, Errepublikarrak homentzeko.

Milaka pertsonak alde egin behar izan zuten zubi honetatik duela laurogei urte hiria suntsitu zuen sute bat dela eta, eta Espainan hasi berria zen gerratearengatik. Proiektu eta ilusio asko bertan behera geratu ziren, eta joandako pertsona batzuek ez zuten itzultzerik izan. Baina bere bizi eta askatasun poiektua Bidasoaren beste aldean egin zuten.

Hoy es un día emocionante porque nuestros vecinos hacen un reconocimiento a aquellos españoles, republicanos que cruzaron el Bidasoa buscando en Francia una vida mejor que pudieran vivir de acuerdo a sus convicciones más profundas y dejando atras el tiempo convulso y sin libertad que se iniciaba, con la guerra primero, y con la dictadura de Franco, después.

Hoy recuerdo las palabras que la alcaldesa de Paris Anne Hidalgo pronunció en un homenaje a los republicanos de La Nueve en París cuando dijo, citando a citando a Claude Levi_Strauss, “las flores frágiles de la diferencia tienen necesidad de penumbra para subsistir”. Y así reivindicó esa cultura que los españoles que tuvieron que dejar su tierra llevaron consigo y mantuvieron durante años, haciéndola compatible con su país de acogida, un nuevo idioma y una nueva cultura. Porque como ella dijo entonces, “la promoción de la cultura y del idioma de los inmigrantes no suponen un peligro sino, al contrario, son la garantía de una buena integración.”

No en vano los republicanos españoles contribuyeron también en la liberación de Francia durante la segunda guerra mundial y fueron, como la historia nos cuenta, parte importante de victorias estratégicas como la de Paris.

Aquellos republicanos supieron ser españoles, franceses y europeos, supieron seguir queriendo asu país y a Francia que fue refugio de quienes buscaron al otro lado de los Pirineos una vida en libertad.

Hoy recordamos a esos hombres y esas mujeres pero lo hacemos también desde lo cercano. Porque este puente y sus dos orillas están llenos de pequeñas historias. De familias separadas por apenas unos metros, pero por la gran diferencia entre la democracia y la dictadura que Franco mantuvo durante décadas en España. Este espacio común nuestro fue un testigo directo de de vidas truncadas

Homenajear a los republicanos y hacerlo desde el país que les acogió es emocionante, porque viene a reconocer los firmes principios de aquellos que lo dejaron todo atrás menos sus convicciones más firmes. De aquellos que tuvieron que dejar sus casas y cruzar este puente con lo puesto. Muchos no lo recuperarían nunca, muchos perdieron para siempre sus casas y sus cosas, nunca sus principios

Hoy queremos recordar a las personas, más allá de los bandos, de la guerra, de las atrocidades. A los padres y madres, abuelos y abuelas, a los niños y niñas que nos han contados sus pequeñas historias a lo largo de estos años.

Quiero agradecer de nuevo a Kote Ezenarro, que me costa que desde los personal también conoce bien esta realidad, su sensibilidad en la colocación de esta placa. Espero que en breve, otra, desde la otra orilla recuerde también la historia de este puente.

Sumo las palabras del poeta Miguel Hernandez a las que luego escucharemos de Lorca:

«Aunque el otoño de la historia cubra nuestras tumbas con el aparente polvo del olvido,

jamás renunciaremos ni al más viejo de nuestros sueños

Hay que seguir soñando y recordando.

Eskerrik asko!