El pasado 1 de marzo los ciudadanos vascos acudimos a las urnas de manera importante y muchos lo hicimos en la confianza y en la esperanza de que había llegado el momento del cambio. Los resultados nos demuestran que muchos en la calle confían en que las cosas pueden hacerse de otra manera en Euskadi. No puedo contar las veces que en estos días he recibido comentarios y peticiones para que el PSE sea valiente y firme en su camino hacía la Lehendakaritza. «Patxi tiene que ser Lehendakari», me han repetido conocidos y ciudadanos a lo largo de esta semana. Estoy convencido de que lo será. El camino será complicado, sin duda, pero merece la pena. Porque queremos a este país y creemos firmemente en que desde el Partido Socialista se puede gobernar Euskadi de la mejor de las maneras posibles, con nuevas ideas y con ilusión. Y desde luego estoy convencido de que el diáologo, el consenso y escuchar todas las voces serán pasos necesarios para conseguirlo