Nos quedan horas para cambiar de año y es momento de buenos deseos para los meses que vienen, pero también para mirar a los meses pasados y hacer balance…

Esta crisis está haciendo mucho daño a personas y familias, pero también está cambiando nuestra forma de ver las cosas. Los cambios que estamos viviendo se van a instalar con carácter permanente y todo se está poniendo a prueba. Las convicciones y los valores también. Y  yo quiero aprovechar este balance para confirmar que mis convicciones y valores se han visto reforzados con la crisis.En un año de trabajo difícil y constante el Ayuntamiento se ha reforzado como una institución fiable, cercana y transparente. Esos quieren ser mis objetivos.

Y vamos terminando el año cumpliendo objetivos, con el presupuesto de 2014 ya aprobado y habiendo generado un ahorro importante en este ejercicio de 2013 que nos ha permitido hacer un plan extraordinario de inversiones  de tres millones de euros para dar respuestas concretas y activar nuestra economía local.

Soy consciente de que la tormenta no ha pasado y  de que mientras el paro siga presente no podemos bajar la guardia pero creo que vamos por buen camino y estoy seguro que llegaremos a buen puerto, porque sabemos dónde vamos, tenemos un proyecto de ciudad que nos guía y que nos permite ordenar y priorizar los gastos cumpliendo nuestros objetivos básicos:

*Apoyar a las personas  y familias que están en peor situación, con el comedor social o reforzando las ayudas de emergencia social.

*Promover el empleo y la economía local. Apoyando a los emprendedores, la creación de nuevos comercios o con inversiones pequeñas en todos los barrios que generan empleo además de resolver los problemas del día a día.

*Mantener los servicios públicos, garantizando el acceso de todos con una política de bonificaciones que persigue ayudar a los que tienen menos recursos.

En el balance de este año, y en el capitulo de los compromisos personales para ser  ALCALDE DE TODOS, no quiero olvidarme de la participación en octubre en la conferencia de alcaldes por la Paz, en la que quise apostar por el diálogo que estoy convencido de que no puede ser malo si se ejerce en total libertad.

Además de compromisos cumplidos hay una palabra importante este año: PARTICIPACIÓN. Calculo que he podido compartir proyectos, charlas y discusiones de manera directa con más de  2000 personas. Ha habido sesiones explicativas, participativas, reuniones públicas, acciones como el plan de revitalización de comercio, el Irun Ekintza para promover la economía y el empleo o la puesta en marcha de acciones como Irun on, pero quiero sobre todo destacar: El alcalde en los barrios,  un programa con el que ya hemos celebrado 15 encuentros con las asociaciones de vecinos, hemos recogido cerca de 400 peticiones de las cuales el 65% se adquirió el compromiso de realizar (230)  y en estos momentos de estos compromisos el 50% ya se han realizado (110). Esto demuestra la utilidad de la participación.

De nuestras visitas a los barrios han salido pequeñas obras que se han ido poniendo en marcha y actuaciones más importantes, no sólo obras: la regulación de los locales  para jóvenes o el Bus rural  que pusimos en marcha en noviembre y durante este primer mes ha superado los 200 servicios  mejorando la vida de los mayores del mundo rural y de las familias .

Y también me gustaría hablar de TRANSPARENCIA. El ayuntamiento debe tener las paredes de cristal y los que trabajamos en él debemos tener los bolsillos de cristal . Ha sido un año en el que hemos inaugurado un nuevo SAC, hemos mejorado nuestra web, y nos hemos comprometido con un código ético y de buen gobierno y un compromiso con Eudel para tratar de devolver a los ciudadanos la confianza en la política y en las administracione

Han pasado muchas otras cosas, ha sido un año importante para la identidad irunesa, para recordar orgullosos nuestro pasado con citas como los 100 años de ciudad, el bicentenario de la batalla de San Marcial, o los 150 años de la llegada del ferrocarril, exitosa cita gracias al enorme trabajo de la  AAVV de San Miguel y la ciudadanía en general.

En lo cultural hemos pensado en nuevas formas de cultura y de relación con nuestros jóvenes creadores gracias a proyectos como Irun Factory e Irun Zuzenean. En Deportes, además de la recuperación de la Liga Asobal por  parte del CD Bidasoaha sido un año de nombres propios como el de Kako Aranburu (copa del mundo de skeet), Mirene Etxeberria (nueva estrella del tiro con arco, está en el centro de Alto rendimiento para deportistas), y por supuesto Julen Agingalde que nos regaló aquel  “Vamos Irun, aupa” y la bandera de Irun sobre sus hombros al proclamarse campeón del mundo de balonmano.

En el capitulo de noticias no tan buenas, sin duda alguna la renuncia de Mugaburu a construir un hotel en el centro de Irun que nos emocionaba a todos… Y la pérdida de Blanco Aginaga, aunque me quedo con la cara de esta noticia que es que Irun le recordará con su Blblioteca.

Además de mirar para atrás este año quiero  hacer también mi carta a los RRMM, a las instituciones:

A la diputación…para que no nos olvide en los proyectos de carreteras  y asuma sus compromisos,  que no lo hacen siempre (  apoyo a los mayores…)

Al Gobierno Vasco  para que no se olviden de Irun en temas tan esenciales como las VPO de alquiler, AES- Bienestar Social destinó en octubre 41.000 euros extra de fondos propios para AES-,  Educación, en definitiva tan simple como cumplir con sus competencias.

Y al Estado para que se ocupe de su patrimonio en Irun para un buen servicio ciudadano. Y por supuesto que dé pasos necesarios para que no nos quedemos atrás en el tema ferroviarias. Yo volveré a apostar por im`pulsar el Protocolo del Espacio ferroviario  irunés.

Y hasta aquí un año que ha dado mucho de sí. Se acaba el 2013 pero espero que lleguemos al 2014 con nuevas ideas y muchos ganas y nuevos proyectos!!!