Hace unos días solicitaba como Alcalde de Irun a la consejería de Sanidad del Gobierno Vasco, la apertura de una sala de maternidad en el Hospital Comarcal del Bidasoa, que por cierto contemplaba en su construcción una planta dedicada a ese fin.
Un servicio a disposición de las futuras madres irunesas y también de las de vecinas poblaciones como Hondarribia y las Cinco Villas navarras. La petición, de ser aceptada, ayudaría a descongestionar el Hospital Donostia. Debemos tener en cuenta, además, el fortísimo incremento de nacimientos de los últimos tiempos en Irun(más de un 30%) y recordar que todo el entorno señalado anteriormente, llega a sumar más de 1000 recién nacidos al año.
Parece que, por lo menos de momento, el Servicio Vasco de Salud no tiene previsto la puesta en marcha de la maternidad en nuestro comarcal, eso he leído por lo menos en la prensa. Una pena. Y es que en estos últimos días han sido muchas las parejas que esperan familia o que la han tenido hace poco, que se han acercado para decirme que sería bonito eso de nacer en casa…
Por cierto que este próximo sábado viviremos uno de los fines de semana más bonitos del año. Ese en el que acompañaré a aquellos que fueron aitas en el pasado 2006 a plantar un árbol por su hijo o hija en las campas de San Marcial.
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