Esta tarde la banda terrorista ETA ha anunciado “el cese definitivo de su actividad armada”. Hoy es un día  para la alegría y para la esperanza, hoy es el día que hemos conocido la noticia que llevábamos años esperando, hoy hemos dado un paso definitivo para la tan deseada Paz. Eramos conscientes de que habíamos iniciado un camino irreversible y hoy hemos confirmado el final de tantos años de dolor.

Hoy la ciudadanía, desde su condena silenciosa pero permanente, junto a la firmeza del Estado de derecho y la tolerancia cero ante los que no condenan, hemos ganado la batalla. Hemos conseguido la PAZ.

Pero no podemos pasar por alto que es un día para el recuerdo de todos aquellos que se han quedado por el camino. No podemos olvidar a todas las víctimas que esta inútil lucha ha dejado y tener más presentes que nunca a aquellos a los que la vida les fue arrebatada por un sinsentido

Hoy tenemos que defender la necesidad de iniciar este nuevo tiempo con diálogo pero con firmeza democrática como única arma y con el compromiso de no olvidar lo pasado para no volver a tener que sufrirlo nunca. Tenemos que seguir adelante y  mirar cara a cara y con dignidad al futuro de nuestro pueblo.

Estoy convencido del papel que las ciudades y sus representantes deben jugar para garantizar ahora un nuevo tiempo dónde la convivencia es ahora nuestro reto y dónde tenemos que aprender a vivir, desde el recuerdo a las víctimas pero sin rencores, conscientes de que empezamos un  nuevo tiempo cargado de esperanza